El trabajo apesta, lo sé.
La semana laboral de 40 horas es una pena de prisión con prestaciones dentales. Los "proyectos de pasión" son sinónimo de horas extraordinarias no remuneradas. Tu jefe no es tu amigo, tu empresa no es tu familia, y el "equilibrio entre vida laboral y personal" es un engaño corporativo. Marx lo llamó trabajo alienado. Dolly Parton lo llamó de 9 a 5. La referencia a Blink-182 no es irónica, es profética.